Covent Garden fue un gran descubrimento en este viaje. El «Apple market» para los británicos, es un mercado antiguo mágico que no deja indiferente a nadie… envuelta en ese ambiente y si dejas ir tu mente, puedes trasnportarte a cualquier rincón del Berlín más auténtico o del Soho neoyorkino, ya que las sensaciones y el tipo de ambiente es bajo mi punto de vista, muy parecido. Variedad de artesanía, antigüedades y víveres se mezclan con tiendas modernas, espectáculos callejeros y puestos coquetísimos, pero lo más significativo es sin duda el ambiente de bares, restaurantes y cervecerías típicas. Elegí para esa tarde un vestido de inspiración naif de Blanco beig con topos negros al que añadí un cinturon estrecho para subirlo un poco y ajustarlo a la cintura, y bailarinas de Topshop de piel y croché. Feliz viernes!